Esta chica estaba cansada. Ella no solía ser de esas que se quejaban por todo y que se negaban a hacer cosas. Ella era lo más tenaz del mundo.
Esta chica, tenía una relación especial con su familia, sus amigos, con ella misma...
No tenía nadie queja de ella. 'Tienes una sonrisa preciosa.'
Llegó un día en el cuál conoció personas de Twitter... nada especial en un principio.
Pasaron cosas, sentimientos... y encontró un pozo.
El pozo era... nuevo. Oscuro, húmedo, pero era un lugar donde podía encerrarse y ver lo que realmente era y qué hacía mal.
Le cogió cariño a ese pozo. También le cogió cariño a hacerse daño.
Al final, se dio cuenta de que era lo más reemplazable del mundo, y que sólo se la quería por el puro interés.
Su amiga la dejó. Se quedó sola.
Tenía un novio, un grupo, unos padres y abuelo que la querían.... supuestamente, estaba saliendo de ese pozo.
Los informes del psiquiatra eran positivos.
Todo mejoraba...
Pero...a veces echaba de menos la sensación de no poder caer más bajo.
Recordaba el pasado, no el suyo, si no el de su chico... y se hundía.
El curso... ella misma...
Todo era una acumulación. Sólo pedía un corte. Sólo eso.
A veces, sentía que nadie la quería; que todos estaban por comodidad, por interés.
Que les importaba una mierda lo que le pasara.
Que estaba mejor fuera de sus vidas. Que muerta, no jodía.
La enseñaron que calladita, estaba más guapa.
Que su opinión valía un cero a la izquierda.
Que no debía ir a sitios inadecuados.
Que se comportaba como una verdadera cría.
Que hartaba a los demás. Que lo había logrado.
Que se iba a quedar sola.
Y un día, recordó todas las palabras hirientes... todas.
Las frases que se dicen en caliente, los desplantes, las broncas....
Y volvió el mono.
Ahí pensó... si llevaba haciéndose daño tanto tiempo y nadie se había enterado... ¿Por qué iba a ser distinto esta vez?
Buscó en sus cajones, recordando que su madre le había tirado las pocas cuchillas que le quedaban.
Y encontró, en un rincón, un segmento de cúter. No era grande, estaba sucio... pero era la mejor opción.
Pensó que no, que no debía hacer eso, que lo había prometido, que iba a empeorar las cosas...
Llamó al móvil de su novio. ''Está apagado o fuera de cobertura.''
Así 2, 3, 4, 5 veces...
Se sentó en la cama, con las mangas remangadas.
Y apretó. Desde la muñeca, hasta el codo.
Dolía, Dios si dolía...
Empezó siendo una simple línea... pero se iba abriendo, dejando entrever las capas de la piel.
Comenzó a manar sangre. Mucha sangre.
Ahora era el turno del otro brazo.
Hizo otro corte, igual que el del brazo hermano.
Manchas en las sábanas, el edredón, el pijama... todo.
Empezó a arrepentirse. No debía haberse precipitado. Pero el sueño llegaba.
Pensó que, por fin, todos serían libres. Que ya no tendría que someterse nunca más. Que podría pensar, decir, bailar....
Y el último pensamiento, fue para él. Deseándole felicidad. Pidiéndole perdón. Y agradeciéndole todos esos meses... que nadie habría logrado aguantar.
En verdad, ella nunca entendió por qué lo hacía. Si ella era de todo, menos la chica de la que debería haberse 'enamorado'.
Eso del amor.... un concepto solamente usado en los momentos de felicidad esporádicos.
Y así, acabó.
Ya no supo qué pensaron todos ellos... pero se fue con la convicción de que les quitó su carga, ella misma, de encima.
-Y algún día, la chica que está escribiendo esto, será valiente, o estará tan al límite, que seguirá las directrices de su protagonista.-
Una historia triste. Lo único que habrá logrado es destrozar y hundir a sus familiares, a sus amigos y a su novio. Les habrá hundido de por vida. Jamás podrán olvidarlo, y solo el recuerdo les llevará a la dejadez y a la melancolía, en definitiva, a unas vidas perdidas en el dolor y el recuerdo amargo. Y no, la autora de esta historia, no acabará como su protagonista, lo prometo. Es fuerte :)
ResponderEliminarA lo mejor les llevaba a unas vidas nuevas, con mejores personas, con más oportunidades, con ganas, con felicidad. Sin discusiones, sin malas palabras, sin echar en cara los pasados, sin rencores.
ResponderEliminarPorque esta autora no piensa cambiar. Quiere recaer.
Y si lo mejor es a, hará a.
A lo mejor les llevaba a unas vidas nuevas, con mejores personas, con más oportunidades, con ganas, con felicidad. Sin discusiones, sin malas palabras, sin echar en cara los pasados, sin rencores.
ResponderEliminarPorque esta autora no piensa cambiar. Quiere recaer.
Y si lo mejor es a, hará a.
No les llevaría a nada mejor, sino a algo peor. Jamás se podrían levantar de eso. Jamás. Y no, la autora está mejor, y la autora ni quiere ni puede recaer, por muy grande que tenga el bajón, logrará pasarlo.
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